En Francia desde 2000. Nació en 1973.
Hija única. Padres: profesores universitarios.

Mis padres enseñan literatura china… yo fui educada en el campus de la universidad, en esa pequeña burbuja.

Fui educada en un modelo cultural de excelencia… Venir a Francia significó muchas rupturas… lo que no es evidente. Me han escogido una escuela para mi, la Escuela de Minas de París.

Lo que me marcó desde mi llegada a París es el desorden… Es desordenada y es sucia… Detesto el carácter gruñón de los franceses, pero aprecio que sean orgullosos de su cultura y de su enraizamiento…. Hoy las calles tienen los mismos nombres que en las novelas de Alejandro Dumas. Para mi es alucinante… Ah, y hay que notar también la burocracia francesa: para obtener rmi carta de residente como estudiante me han pedido un certificado bancario y para abrir una cuenta el banco me ha pedido un permiso de residencia. Esta lleno de cosas ridículas como esta.

Por mi trabajo tengo que ir a muchos lugares dentro del espacio Schengen. Aun cuando tengo un permiso de residencia tengo que renovarlo cada año, cada vez que yo pido la visa es un procedimiento lento, complicado y caro… Sin embargo me siento bien en Francia, tengo amigos. … Las condiciones de trabajo son buenas… 5 semanas de vacaciones… en China son siete días. No tengo necesidad de ir a mi país, salvo para ver a mi familia…

Me gustaría traer cosas de la China tradicional, valores como el respeto por los viejos, por la palabra empeñada. Para mi son valores chinos… Probablemente hoy ya no es así… En mi empresa hay un proyecto de trabajo en China. Me gustaría ser ese puente, ayudar a comunicar. He pedido la nacionalidad francesa para facilitar mis actividades. Puede ser que empiece a sentirme francesa, puede que me detenga y eche raíces.